Inscripción a Attiae Auli
En nuestra visita por la Vera de
Plasencia, acompañado por Julio Esteban Ortega profesor de Historia antigua de
la Universidad de Extremadura, pasamos a visitar la parroquia de Jarandilla, allí se encuentra una Aedícula
funeraria en mármol policromado con retrato femenino, flanqueado por columnas
corintias que sostienen un arco carpanel.
Lleva acróteras (pedestales que
sujetan una estatua y ornamento),y relieve en las partes inferiores. Los
laterales van decorados con guirnaldas de laurel y en el reverso otras
guirnaldas con cintas en las puntas. El busto de la difunta es una
representación en altorrelieve de exquisita elaboración. Lleva túnica y palla y
está en posición de dar el pecho al niño que porta en su mano izquierda. En la
parte inferior de la hornacina se emplazó el epitafio, elaborado con letra
capital esbelta y los signos de interpunción en punto. El texto está bastante
deteriorado y, sobre todo la primera línea, se lee con dificultad.
Dimensiones:
75 x 50 x 19; campo epigráfico: 13 x 35; letras: 3.
Epitafio Sepulcral
D(is)
M(anibus) s(acrum)
Attiae·
A(uli)· fil(iae)· Avitae· A(ttia) Galatia
mater·
filiae · karissimae
annor(um)·
XXIIII· s(uo)· s(umptu)· effecit
El
final de la línea 3 es controvertido.
Callejo
leía se(pulcrum) f(iliaeque) fecit,
pero
Edmonson
ofrece varias alternativas: s(ibi)
s(uisque),
s(upra) s(criptae) o s(ua)
s(ponte).
HEpOL
a través de foto cree poder leer:
(et)
s(ibi) sep(ulcrum) fecit.
Y
no habría que descartar esta última lectura si tenemos en cuenta el cambio de
coloración más clara en la zona de la supuesta P, debido a una mayor erosión de
la piedra en esa zona. El único inconveniente que vemos en esta interpretación
es el signo de puntuación entre S y EP, aunque no sería la primera vez la
interpunción entre letras de una misma palabra. En cualquier caso se trataría
simplemente de dilucidar con estas abreviaturas si el monumento se hizo para la
madre y la hija o lo hizo la madre de su dinero.
La
interpretación de Edmonson s∙ s∙ efecit no
tiene paralelos, como el mismo señala, pero tampoco es muy común la de Callejo.
En
origen la pieza, correspondía a un monumento funerario mandado a hacer por Attia
Galatia, pero posteriormente se reconvirtió en una virgen con
niño. Para ello la obra fue retallada de tal manera que el pequeño animal (quizás
un pájaro o un conejo) que portaba en su mano izquierda se convirtió en un niño
Jesús; y la fruta (quizás una manzana) que asía en su mano derecha se
transformó en un pecho, de ahí su posición un tanto forzada. Por último se
repintó la talla hasta alcanzar su aspecto actual.
Aunque
no se puede asegurar, probablemente se trate, como dice Edmonson, de una de las
muchas piezas que García Fernández Manrique, III conde de Osorno se trajera
desde Mérida al municipio cacereño de Galisteo hacia 1530 y que después fue regalada
por este o por su hijo Don Pedro a la familia Álvarez de Toledo, Condes de Oropesa
y Señores de Jarandilla. Al no haber pruebas fehacientes de que esta pieza viajara
junto con otras desde la capital emeritense en el siglo XVI, mantenemos su procedencia
de Jarandilla de la Vera.
La onomástica apuntaría también en este sentido pues tanto el gentilicio como el cognomen de la difunta se repiten en la vecina Capera. Attia lleva el mismo nomen que aquella una aristócrata caperense, Attia Paterna, que disponía de una estatua en el foro de la ciudad y cuyo pedestal se conserva hoy día en la portada de los jardines de los Alba en Abadía. Del mismo modo, Avita es el cognomen de la abuela de otra insigne dama norbense que fue admitida como ciudadana caperense, y de la que se conoce una bella inscripción de mármol que formaba parte de un pedestal de estatua ubicado en el foro157.
El cognomen de la madre, Galatia, parece ser indígena y solo cuenta con un testimonio más en la epigrafía peninsular en una inscripción procedente de la freguesía de Castelo Novo (Fundao-Castelo Branco)158.
Curiosamente, en la inscripción siguiente, también de Jarandilla, se conmemora a Galaeto A(uli) Triti f(ilio), coincidencia onomástica que apoyaría la procedencia local de este epígrafe que nos ocupa.
Edmonson
la fecha en época de los Severo, entre finales del siglo II y comienzos del III
d. C. a juzgar por la paleografía, el tipo de monumento y el peinado de la difunta.
La utilización del superlativo que se generaliza a finales del siglo II d. C. apunta
en este mismo sentido.
A.
de la Berrueza, 1667 (reimpr. 1891); CIL II
856; C. Callejo 1963, 226, foto (AE
1965,
+70; HAE 2264); ERAE
VIII; CPILC 316;
CPILC 602; J. Edmonson,–T. Basarrate–
W.
Trillmich, 2001, 2001, 129-132, n. 6 (= HEp 11,
2001, 61) HEpOL, 21794.
Julio
Esteban Ortega. Agustobriga. C.I.L. Cáceres.2019
Jose Antonio Pajuelo Jiménez
"CREANDO CULTURA"
No hay comentarios:
Publicar un comentario